La Aviación Naval, gracias a su poderosa y moderna capacidad operativa y a la experiencia de sus tripulantes, es hoy uno de los componentes fundamentales de nuestra Armada. Posee aeronaves como los Fokker F60, Helicópteros UH-3H y Emstrom F28, que le permiten cumplir variadas y sofisticadas misiones, contando con sus diferentes brazos de apoyo, como los Escuadrones Aeronavales y el Servicio de Mantenimiento Aeronaval.
Es importante destacar que nuestras aeronaves llevan a cabo diferentes misiones, tanto de exploración marítima, vectoreo de unidades aéreas y superficie, control del tráfico marítimo y protección de la vida en el mar, contribuyendo de esta forma con el resguardo de nuestra soberanía nacional, así como el desarrollo nacional, cumpliendo con éxito las misiones encomendadas. Asimismo, se efectúan vuelos de búsqueda y rescate, vuelos de apoyo logístico en las diferentes zonas navales, así como en intervenciones oportunas e inmediatas en casos de desastres naturales y acciones cívicas.
Dispone de personal constantemente entrenado y capacitado en diferentes instituciones armadas del mundo y, nuestros pilotos realizan vuelos con simuladores de alta tecnología, alcanzando el profesionalismo que forma parte de nuestra excelencia.
En la línea del tiempo
Su historia se remonta a casi 100 años de trayectoria destacada, siendo las aeronaves navales las primeras en surcar y vigilar los aires del Perú, como por ejemplo la “Keyston I-R-4” que voló la Amazonía en 1927. Por supuesto, la Aviación Naval es una de las pioneras en Latinoamérica.
El 9 de diciembre de 1919 un decreto supremo inició las primeras gestiones para organizar un Cuerpo de Aviación Naval, que afianzaría la soberanía nacional al integrar aeronaves a lo que entonces constituía la flota: buques y submarinos. Posteriormente, el 26 de enero de 1920 un nuevo dispositivo legal crea el Cuerpo de Aviadores Navales siendo nombrado como Jefe del Servicio de Hidroaviación Juan Leguía Swayne, asimilado con el grado de Capitán de Corbeta.
Posteriormente, la Misión Aeronaval Americana establecida en el Perú de 1924 a 1930 consolidó la Aviación Naval profesionalizando sus actividades. Se crearon las estaciones aeronavales de San Ramón y de Itaya, que permitió la unión aérea entre Lima e Iquitos, mediante vuelos regulares. Este hito de la aviación nacional merece destacarse pues de esta manera la Marina lograba unir tan lejana zona del país con la capital de la República.
Transcurrirían varias décadas antes que la Aviación Naval realizara lo que históricamente fue su segundo despegue. Así, con el Decreto Supremo Nro. 18 del 24 de julio de 1963, se creó el Servicio Aeronaval de la Marina de Guerra del Perú. De esta manera se logró satisfacer la necesidad imperiosa de contar con la Aviación Naval en apoyo de la Escuadra. El Capitán de Fragata Armando Figueroa Roggero fue el primer Comandante del Servicio Aeronaval y su presencia en la Base Naval de Callao tripulando el helicóptero Bell 47G es parte de la historia.
El 1 de diciembre de 1980, con motivo de la creación de la Comandancia General de Operaciones Navales, el Servicio Aeronaval, tomó el nombre de Fuerza de Aviación Naval, como parte integrante de las Fuerzas Navales.
La Fuerza de Aviación Naval es hoy parte de la Comandancia General de Operaciones del Pacífico, despliega una importante capacidad operativa a través de sus aeronaves pertenecientes a los Escuadrones aeronavales con los que cuenta esta fuerza.
El Escuadrón Aeronaval N°11 está compuesto por los aviones B-200 y Fokker 60 misionados para la exploración marítima. Extensas áreas del Mar de Grau son cubiertas gracias a su gran autonomía, así mismo realizan operaciones de vigilancia y reconocimiento, búsqueda y rescate. Los Fokker 50 pertenecientes a este escuadrón están destinados para inteligencia de señales (sigint). Este escuadrón también cumple funciones de evacuaciones aeromédicas, transporte de personal y carga así como apoyo a la población en caso de desastres naturales.
El Escuadrón Aeronaval N°21 está compuesto por helicópteros multipropósito SH-2G con capacidad de Guerra Antisubmarina y Guerra Antisuperficie, también posee helicópteros AB-212 que forman parte del sistema de armas teleguía de los misiles mar-mar de las fragatas y finalmente los helicópteros Bell 206B cumplen funciones de instrucción y entrenamiento con visores nocturnos.
El Escuadrón Aeronaval N°22 tiene asignado los helicópteros SH-3D con capacidad de Exploración marítima, Guerra antisubmarina y Guerra antisuperficie (armados con misiles aire superficie), y los helicópteros multipropósito UH-3H para cumplir misiones de búsqueda y rescate (SAR), evacuaciones aeromédicas, operaciones de interdicción marítima, transporte de personal y carga así como apoyo a la población en caso de desastres naturales.
El escuadrón Aeronaval N°23 cuenta con helicópteros AB-412 SP, con el fin de ejecutar operaciones aéreas de reabastecimiento logístico, búsqueda y rescate (sar), apoyo a las operaciones guardacostas contra los ilícitos, apoyo en caso de desastres naturales así como contribuir con acciones sociales cuando sea requerido.
El Escuadrón Aeronaval N°32 es el escuadrón de transporte se encarga de trasladar personal y carga en misiones operativas, además apoya con helicópteros en la Amazonía. Cuenta con aviones Antonov AN 32B y helicópteros MI 8T. El ejercicio de su misión se complementa con tareas de acción cívica en diversos puntos del país.
El Escuadrón Aeronaval N°33, es el escuadrón de instrucción para pilotos de Ala Rotatoria situado encuentra en la Base Aeronaval del Callao. En este escuadrón se forjan nuestros pilotos aeronavales de Ala Rotatoria, a bordo de los helicópteros Emstrom F28F cumpliendo exigentes etapas de vuelo visuales e instrumentales, diurnos y nocturnos para posteriormente continuar sus especializaciones en aeronaves de mayor envergadura.
El Escuadrón Aeronaval N°31, es el escuadrón de Instrucción para pilotos de Ala Fija alberga la Escuela de Aviación Naval en San Juan de Marcona. En este centro se forjan nuestros pilotos aeronavales, quienes desarrollan las habilidades necesarias en el vuelo en un exclusivo espacio aéreo a bordo de los aviones T-34 C. Luego de exigentes prácticas instrumentales y visuales, tanto diurnas como nocturnas, los pilotos cumplen con las etapas básica e intermedia para continuar en la Base Aeronaval del Callao su especialización correspondiente.
El personal subalterno cursa estudios en la Escuela de Aviación Naval en las especialidades de sensorista, mecánica y motorista de aviación; luego de dos años se califican como tripulantes aeronavales, formación que posteriormente podrán continuar en la Escuela de Avanzada.
De esta manera, la Aviación Naval cumple con su responsabilidad en la defensa nacional y también participa en las acciones de la Marina de Guerra a favor de la inclusión social de los peruanos en todo el país.